Sé que muchos pensaran que mi relato será falso, y es que hasta ni yo me lo creo, pero aun así le relatare como fue mi encuentro con un sacerdote.
Esto ocurrió hace 4 años, estaba un día navegando en un chat normal pasando el tiempo y comencé a chatear con alguien que me dijo que estaba en mi misma ciudad, después de charlar por un momento me pidió mi número de celular y comenzamos a hablar por varios días, me dijo que tenía 30 años y vivía en el centro histórico de la ciudad, por su acento pude deducir que era del interior, después de varios días de charlar acordamos vernos en su “casa” lo cual dije que sí y cuadramos todo, me cito en una de las iglesias más emblemáticas de la ciudad, deduje que de ahí íbamos a su casa, que estábamos cerca de ella. Cuando llegue al lugar a la hora acordada me dijo que entrara por una puerta que estaba al costado de la iglesia, yo ingenuo entre, y para mi sorpresa era la iglesia, y le dije que por que estábamos en la iglesia, y me dijo que él trabajaba ahí, nunca me dijo que era el sacerdote, yo hasta supuse que era el ayudante, y bueno fuimos a un ático o altillo que estaba detrás del despacho, había una habitación no muy lujosa, estaba todo lo necesario para dormir bien, y en esa caso para tener sexo. Nos sentamos en la cama y pude notar su timidez y su torpeza, tuve que tomar la iniciativa y coloque mi mano en su pierna, me dijo que ya había estado con hombres, pero nunca lo había hecho dentro de la iglesia, aunque a mi parecer no lo hicimos en la iglesia, pues estábamos bastante alejados del recinto, de los santos, de todo.
Andrés, así se llamaba el sacerdote, era un hombre de unos 1.75 cm de altura, blanco, labios rosados, cabello corto y liso, tenía una verga promedio, diría que unos 16 cm 17 cm erecta, ya habían pasado casi 20 minutos y no decía nada, estaba estático y a mí ya me hervía la sangre de las ganas que tenía, total me lance y le dije que se quitara la camisa, y así nos fuimos denudando poco a poco, tenía un buen cuerpo, no soy de besar mucho, pero esos labios rosados no podía dejar de besarlos en ese momento, sentí que él ya estaba tomando la iniciativa, comencé a chuparle la verga, estaba exquisita, por su reacción supe que se iba a venir rápido, se paró de la cama y fue a buscar el condón y lubricante, se alisto y me puso de pie, fue metiendo su verga poco a poco en mi culo apretado, a pesar de que no tenía la verga grande me dolía mucho, comenzó suavemente, me tapaba la boca con la mano, pude sentir como domina mi cuerpo, sentí que ya no era la misma persona tímida de hace un momento, me dijo que no gritara ni hiciera ruido, comenzó a culiarme muy rico, suave y profundo, no cambiamos de posición, así me culio y se vino después de unos 15 minutos, quede satisfecho ya que la adrenalina de mi cuerpo hizo lo demás.
Pero a todas estas, ¿cómo me entere que Andrés era sacerdote? Después de nuestro encuentro yo estaba preparándome para hacer la confirmación, en una salida que planeamos con el grupo fuimos a un encuentro, y para mi sorpresa el padre que nos confesó ese día fue ¡Andrés! Para mí fue algo muy incómodo, pues ¿cómo nos iba a confesar alguien pecador? Ese momento tuve sentimientos encontrados, pero actué normal y con más confianza pude decir mis pecados, incluyendo lo que hice con él.
viernes, 29 de septiembre de 2017
jueves, 10 de agosto de 2017
¿CUÁNDO ME DI CUENTA QUE ERA GAY?
Cuando
uno está atravesando por la etapa de aceptación es muy difícil, porque la mayoría
de las veces quieres ser “normal” y en mi caso no elegí ser gay, fue algo que
me toco aceptar y que después de analizar y pasar por muchas adversidades me sentí
seguro y orgulloso de lo que era.
En el
transcurso de mi niñez y mi adolescencia me fui dando cuenta el gusto por los
chicos, a pesar de que en la escuela tuve mi novia nunca me sentía a gusto, lo hacía
para complacer a mis compañeros y por ser un chico “normal”.
A la
edad de los 15 años empezó mi calvario y mi preocupación, ya que a esa edad tenía
muchas dudas sobre mi sexualidad, no sabía en realidad si me gustaban los
hombres o las mujeres y a pesar de haber salido con chicas y tener relaciones
nunca me sentí completo, sentía un vacío dentro de mí que no me deja ser libre,
no me deja ser yo mismo y era algo que tenía que descubrir.
Aceptar
que era en Gay en ese momento era muy difícil
para mí, ya que dentro de mi corazón sabía que lo era, pero no lo aceptaba, no
era normal, yo no podía ser así, pensaba en mi familia, en mis amigos, en el
que dirán de la sociedad.
En el
transcurso de mi aceptación yo todos los días cuando me acostaba lloraba y le rezaba
a Dios, le pedía con toda mi alma y corazón que me dejara ser un chico normal, quería
tener una novia y en un futuro tener una esposa e hijos como una persona
normal. El tiempo transcurría y no había un día que me sintiera “anormal” siempre me hacia esta
pregunta ¿por qué yo? ¿Por qué tengo que pasar por esto?
Después
de varios años decidí hacer algo que era lo único que me iba a confirmar si
realmente me gustaban los hombres o no, y era tener una experiencia con uno,
era lo más lógico y más sensato que podría hacer en ese momento, aunque dentro
de mi sabía que era Gay.
Después
de varios veces conocí un chico llamado Jorge, lo cual charle por mucho tiempo
con él , le comente mi situación y decidió ayudarme, con el me desahogaba y podía
sentirme libre, un día cualquiera llego el momento más esperado por mí, estábamos
solo en su casa y me beso, fue algo raro para mí, pero después de ese beso supe
realmente que era gay, sentí algo que jamás había sentido con una mujer, me di
cuenta que las mujeres no me gustaban, quería complacer a los demás, a mis
amigos, a mis papas, a la sociedad, pero ¿Dónde quedaba yo?
¿Dónde quedaban mis sentimientos? Fue algo muy
difícil de aceptar, pero lo hice con valor y con determinación.
A los
20 años me acepte tal cual como soy, soy Gay y me siento muy orgulloso, soy una
persona normal con gustos diferentes, muchas personas piensan que ser gay es
ser “raro” pero no lo es, somos personas como los demás, y que a veces las
luchas internas nos hacen pensar cosas diferentes, en mi caso aceptarme como
tal fue muy difícil porque vivimos en una sociedad que juzga por lo que haces y
como eres, y ser gay no está bien para muchos, pero en la actualidad muchos
amigos me quieren tal cual como soy, unos te rechazaran, otros te señalaran y
eso es respetable para mí, mientras no te denigren, ni hagan bullying está bien
porque respeto las opiniones y creencias de los demás, afortunadamente siempre
estoy rodeado de personas increíbles, que no me juzgan, no me reprochan nada,
pero lo más importante es contar con el apoyo de tu familia que al principio no
será nada fácil, pero al final entenderán todo, también confieso que en el transcurso
de mi proceso tuve que buscar ayuda psicológica lo cual facilito todo.
jueves, 3 de agosto de 2017
blog, entrevista, gay, relato, sexo, sextuitero, twitter
Entrevista a Sextuitero: @Barebackerobta.
En esta primera entrada a mi Blog, conoceremos a camilo, un Sextuitero frentero, arriesgado y que goza de su sexualidad a plenitud. Conoceremos su estilo de vida, proyectos y otras cosas importante en su vida. Lo pueden seguir en twitter como @Barebackerobta.